Desde tiempo inmemoriales se han utilizado las plantas para curar enfermedades y dolencias.
Civilizaciones ancestrales como los egipcios, los griegos o los romanos utilizaban toda clase de plantas para tratar y mejorar su estado de salud, tanto por dentro como por fuera.
Durante mucho tiempo el poder de las plantas quedó relegado en un segundo plano y fue a partir del siglo XX cuando comenzó de nuevo a despuntar del uso de las plantas, sobre todo en la cosmética. Así, podemos hablar de un resurgimiento de la cosmética natural.
Actualmente, aunque todavía hay mucho por hacer, vivimos un momento “dulce” , ya que se ha demostrado la eficacia de sus ingredientes no solo de forma empírica, sino también a través de estudios científicos. El poder curativo y la capacidad regeneradora de las plantas vienen de sus muchos principios activos que sintetizan y almacenan durante su crecimiento.
La cosmética que cura
Calendula, lavanda, curcuma, jojoba, salvia, romero, rosa mosqueta… y así podríamos estar nombrado todos los ingredientes que usamos en Naturalemente El poder de todas estas plantas es muy variado y rico, desde cicatrizantes o antisépticas hasta astringentes o antiinflamatoria. Cada planta tiene sus virtudes y la clave está en saber combinarlas para crear un producto que ayude a cada tipo de piel a estar saludable.
En nuestra cosmética utilizamos plantas tradicionales y propias de nuestro entorno que han sido utilizadas durante siglos para el cuidado de la piel. Hemos recogido este legado y conocimientos que tenemos hoy en día hemos creado una cosmética 100% natural y 100% ecológica.
Hemos creado cosmética que sana
Ahora, que estamos tratando en concreto el tema de la cosmética sanadora nos gustaría destacar sobre todo tres de nuestros productos indispensables para una piel y cabello saludable : Crema Sanadora de Calendula, Shampóo Curcuma y Jabon de Curcuma y Manzanilla